El arquitecto David Vincent (Roy Thinnes) toma un camino equivocado y se topa con un restaurante abandonado en medio de la nada. Intenta quedarse dormido al costado de la carretera y lo despierta un aterrizaje de platillo volador. Después de esto, se apresura a ir a la policía de Santa Bárbara para contarles lo que sucedió, pero el teniente Ben Holman (J.D. Cannon) rechaza los desvaríos de Vincent.