Dos astronautas programados para ir a la primera misión a la Luna mueren en el mar por una misteriosa niebla roja generada por un helicóptero. Gavin Lewis (Peter Graves), a cargo de la seguridad, parece descartar las teorías de Vincent, pero tiene sus propias sospechas. El mismo Lewis fue seleccionado una vez para la misión a la Luna, pero una noche sucedió algo que no puede recordar e inexplicablemente terminó con presión arterial alta que lo descalificó. También tiene un testigo del incidente, el vagabundo Charlie Coogan (Strother Martin).