A fines de los ’70, Scooby-Doo ya no generaba tanto ruido. La fórmula se había gastado, y la cadena ABC empezaba a pensar en cancelarlo. Fue entonces cuando alguien en Hanna-Barbera tiró la idea: “¿Y si le metemos un sobrino con más chispa?” Así nació Scrappy-Doo, el cachorro con voz fuerte, puños listos y cero miedo, pensado para revitalizar el show y enganchar a los chicos con algo más frenético.
Mark Evanier, guionista convocado por los creadores Joe Ruby y Ken Spears, escribió el episodio piloto basándose en un cómic previo de Gold Key. Pero el canal quería suavizar el carácter de Scrappy, así que reescribieron parte del guion sin avisarle al autor.
“Scrappy resolvía muchos problemas de guion… simplemente se lanzaba sin pensar.”Ruby y Spears, a pesar de haber creado el universo Scooby, no estaban del todo convencidos del nuevo personaje.
- Duane Poole, editor de historias, entrevista en Los Ángeles, 1982
“Scrappy no nos gustaba. No nos gustaba a ninguno de los dos.”Pero el público respondió. En 1982, “El show de Scooby-Doo y Scrappy-Doo” ya no era el clásico misterio con todo el equipo. La estructura cambió a cortos de 7 minutos, con un trío protagónico: Scooby, Shaggy y Scrappy. Más acción, más slapstick, y menos suspenso. Daphne, Vilma y Fred desaparecieron del mapa.
- Joe Ruby, entrevista para *Scooby Addicts*, California, 2006
“La idea era simplificar todo: menos personajes, más gags, y un Scooby más físico.”Fueron 13 episodios en esta etapa, parte del bloque The Scooby & Scrappy-Doo/Puppy Hour. Aunque muchos fans extrañaban los misterios clásicos, el nuevo tono mantuvo viva la franquicia.
- Alan Dinehart, director de producción, declaraciones en archivos de Hanna-Barbera, 1982
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