Shaka se adentra en el bosque de Nkandla y le pide a un herrero que forje una lanza punzante, llamada 'ixwa'. Shaka regresa a su regimiento y convence al rey de que vale la pena probar su nuevo método de guerra. Su nuevo regimiento se utiliza contra los zulúes y gana el día. Poco después, Senzangakona muere y Shaka toma el trono para él.