Cuando Stargate Universe debutó en 2009, vino a sacudir el universo Stargate: nada de aventuras ligeras ni villanos claros, esta vez un grupo de humanos quedaba atrapado en la nave Destiny, flotando a años luz de la Tierra sin posibilidad de volver. La tensión era constante, y cada decisión podía ser cuestión de vida o muerte.
Lo más loco: SGU mezcló survival sci-fi con drama humano y secretos peligrosos. Robert Carlyle (Dr. Nicholas Rush) entró como el genio ambiguo que siempre tenía un plan oculto… y sí, el tipo hizo que todo el equipo lo desconfiara capítulo tras capítulo. Louis Ferreira (General Young) intentaba mantener la calma mientras lidiaba con cadetes jóvenes que a veces no daban pie con bola.
Amanda Tapping volvió al universo Stargate con un rol más oscuro como líder de operaciones, demostrando que podía pasar del humor de SG-1 a la tensión extrema de SGU sin despeinarse.
“Queríamos explorar cómo reaccionaría la gente de verdad ante una situación desesperada: miedo, egoísmo, heroísmo… todo junto.”Cada personaje tenía secretos y conflictos que explotaban en momentos inesperados. Eli Wallace pasó de ser un nerd de computadora subestimado a héroe improvisado; el tipo hizo que todos lo miraran distinto después de salvar a la nave más de una vez.
- Brad Wright, cocreador de SGU
“La nave Destiny era otro actor: tenías que sentir que estaba viva, impredecible, casi respirando con nosotros.”La recepción fue dividida: algunos extrañaban el tono aventurero de SG-1, otros celebraban la intensidad y el realismo adulto. Pero nadie podía negar que SGU llevó la saga a un terreno más íntimo y psicológico.
- Robert Carlyle, entrevista con Sci-Fi Wire
“Sabíamos que estábamos haciendo algo diferente. Cada fan que la recuerda lo hace por su intensidad y por los personajes, no solo por los efectos.”En resumen: Stargate Universe no fue solo un spin-off; fue un experimento audaz que convirtió a la Destiny en escenario de supervivencia, intriga y drama humano. Corto de duración, sí, pero intenso y recordado como el Stargate más oscuro y humano de todos.
- Brad Wright, entrevista 2012
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